Cuando busque vacaciones en yates de alquiler, encontrará muchas opciones diferentes. Una diferencia clave que habrá observado es que algunas se denominan "alquiler de yates de lujo" y otras no. Entonces, ¿qué hace que un alquiler de yates sea un alquiler de yates de lujo?
Aunque el término "lujo" no está sujeto a normas específicas en toda la industria, todos los alquileres de yates que ofrecemos son, de hecho, verdaderos alquileres de yates de lujo. Esto es lo que significa para usted, como nuestro huésped:
- Ninguna petición es demasiado pequeña. Estamos aquí para asegurarnos de que sus vacaciones superen sus expectativas. Si usted tiene peticiones especiales, necesidades dietéticas, o está celebrando un hito u ocasión emocionante, por favor háganoslo saber y haremos todo lo posible para complacerle.
- Servicio excepcional, desde la reserva inicial hasta la salida. Nuestro equipo de gestión de yates y las tripulaciones de yates experimentados son todos profesionales de la industria comprometidos con la hospitalidad de primer nivel que es siempre personalizado y atento, y nunca dominante.
- Buena comida y cócteles, todo incluido. Los chefs de nuestros yates están formados en técnicas culinarias y mixología ejemplares, y abastecemos cada alquiler de yate sólo con los ingredientes más frescos. Le sorprenderán las increíbles comidas que nuestra talentosa tripulación crea en alta mar.
- Todos. Las. Todas. las. comodidadesNuestros yates están equipados con todo lo que necesita para disfrutar de la mejor escapada, incluyendo lo último en equipamiento para deportes acuáticos, así como muchos detalles ecológicos.
- Yates impecablemente mantenidos. Todos los yates de nuestra flota están extremadamente bien gestionados para proporcionarle una estancia segura, relajante y confortable.
- Vacaciones experienciales. Navegar con nosotros es una experiencia de inmersión en este increíble destino. Explore las maravillas del paraíso con los más apasionados por compartirlo. Prepárese para ser transportado.
Le invitamos a experimentar en primera persona la diferencia que supone alquilar un yate de lujo. Aunque le advertimos: una vez que se pase al lujo, nunca volverá atrás.